Los suelos o pavimentos son un elemento clave en los proyectos de interiorismo. Tanto que, la elección del pavimento adecuado, puede marcar la diferencia entre un espacio ordinario y uno extraordinario.
Los suelos en interiores desempeñan un papel fundamental en la estética, funcionalidad y comodidad de cualquier espacio, ya sea una casa residencial, un hotel lujoso, un concurrido aeropuerto, una oficina corporativa o un acogedor comercio.
La elección del suelo adecuado en el diseño de espacios interiores, es esencial y no se puede subestimar. Siempre hay que tener en cuenta, además de la estética, el uso que se le vaya a dar y las condiciones específicas del espacio.
Pavimentos de gran durabilidad.
Un suelo se elige y se instala para que permanezca durante años y ofrezca las mismas prestaciones que el primer día. La durabilidad, resistencia, aislamiento, presupuesto y la fácil limpieza… son algunos de los aspectos a tener en cuenta.
En la actualidad existe una gran oferta de pavimentos y revestimientos para interiores disponibles en el mercado con materiales y acabados muy variados, que se adaptan a todos los estilos y a cualquier proyecto de interiorismo.
La importancia del pavimento en el interiorismo.
En cuanto a la importancia del pavimento en el interiorismo, se tienen en cuenta aspectos como:
- La estética y diseño. El pavimento es una parte integral del diseño interior. Puede transformar por completo la apariencia de un espacio, ya sea añadiendo elegancia y sofisticación con suelos de mármol, creando un ambiente acogedor con madera o proporcionando un aspecto moderno con suelos de microcemento. Su elección tiene un impacto decisivo en el aspecto del lugar o espacio interior donde se instalen.
- La funcionalidad y durabilidad. Los suelos de interiores están sujetos a un desgaste constante debido al tráfico diario. Por lo tanto, deben ser resistentes y duraderos para mantener su atractivo con el tiempo. La elección del pavimento correcto garantiza que los suelos sean capaces de soportar el uso continuo y las condiciones específicas de cada espacio.
- El confort y entorno agradable. El pavimento también tiene un impacto directo en el confort y la calidad del ambiente interior. Los suelos también pueden proporcionar aislamiento térmico y acústico, generando un entorno más cómodo, tranquilo y seguro.
Tipos de suelos para diferentes espacios.
Cada suelo posee características distintas que los hacen únicos y especiales. Siempre se debe de elegir el que este compuesto por el material más idóneo para el tipo de uso que se le vaya a dar al espacio en cuestión.
Casas Residenciales.
Los suelos de madera, como el roble o el nogal, son populares en hogares residenciales debido a su belleza y calidez natural, además de su capacidad como aislante térmico y acústico. Maderas como el castaño, eucalipto, cerezo americano, teca, pino, haya, arce, wengué o ipé son solo algunas de las maderas de interior a las que se puede optar en la actualidad.
Los suelos laminados ofrecen una alternativa económica que imita la apariencia de la madera a un costo menor. Están compuestos de tres o cuatro capas, la decorativa es la que permite distintos patrones, colores e imágenes impresas. Gracias a su capa de protección superior no necesita apenas mantenimiento y su sistema clic en la gran mayoría de colecciones facilita su instalación.
El gres porcelánico o porcelanato, un material cerámico, muy resistente y versátil, su aislamiento térmico es notable y está disponible en una variedad de diseños y tonalidades que se adaptan a cualquier estilo de decoración.
Hoteles, cines, salas de fiesta.
Las moquetas brindan lujo y comodidad a las habitaciones de hotel, además de ayudar a absorber el sonido y crear un ambiente acogedor. Se pueden personalizar incluyendo la imagen corporativa de la empresa, o un diseño exclusivo que haga juego con el resto de elementos como tapizados, cortinajes, ropa de cama… Además de amortiguar el ruido, también regulan la humedad ambiental, así como evitan la expansión de polvo y ácaros.
Los suelos de mármol, muy empleados en el caso de hoteles de lujo. A menudo optan por el mármol para sus áreas comunes debido a su aspecto elegante y durabilidad. Aunque necesitan un mantenimiento como es el pulido cada cierto tiempo, su belleza siempre está presente.
Aeropuertos, oficinas y centros comerciales.
Los pavimentos vinílicos (PVC) o suelos vinílicos, son materiales resistentes al desgaste y fácil de mantener, lo que lo convierte en una opción popular para entornos con alto tráfico como hospitales, laboratorios, aeropuertos, centros educativos, bibliotecas. Cuenta con una gran gama de colores y diseños, algunos con imitación a piedra, distintas maderas, acero, baldosas hidráulicas… Este tipo de suelos son antideslizantes y soportan muy bien la humedad y el derrame de posibles líquidos o sustancias químicas.
El cemento o cemento pulido es moderno y duradero, perfecto para espacios interiores y exteriores. Son idóneos para grandes superficies como, comercios, fábricas, oficinas, naves y garajes particulares, comunitarios o situados en áreas comerciales.
Las alfombras o moquetas modulares son fáciles de instalar, mantener y permiten una fácil sustitución de áreas dañadas. Mejoran la calidad del aire en interiores. Cuentan con una gran variedad de diseños para adaptarse y realzar la estética de cualquier entorno. Ofrecen mayor comodidad al caminar que otro tipo de suelos.
Comercios, hospitales y residencias.
El suelo de linóleo es respetuoso con el medio ambiente y versátil. El linóleo es una elección popular para tiendas y comercios. En hospitales y residencias ofrecen además prestaciones especiales como son la acústica, antideslizamiento o resistencia electrostática fundamental en salas de operaciones o con un gran número de ordenadores o aparatos electrónicos. Estéticamente, se pueden combinar distintos colores para separar áreas o, por el contrario, darle una continuidad visual a los espacios.
Por todo ello, los pavimentos para interiores son elementos cruciales en el diseño de espacios, y su elección debe basarse en la estética deseada, la funcionalidad requerida y las condiciones específicas del espacio. Sea cual sea el tipo de suelo que elijamos, su impacto en la apariencia y la experiencia de un espacio no debe subestimarse.